El ciudadano es una unidad económica fundamental de Empire Earth que se encarga de la construcción de edificios y la recolección de diversos recursos. Se produce durante todas las edades en los capitolios y los centros de ciudad, y es la única unidad en el juego con ambos sexos, aunque el jugador no puede elegir alguno al producirlo.
Los ciudadanos pueden ser recolectores de comida, cazadores, mineros, leñadores, constructores y reparadores. Pero también están al servicio de las armas cuando es necesario, pese a que su fuerza de ataque no es muy grande.
Al igual que otras unidades, los ciudadanos cambian su apariencia cuando se avanza a ciertas edades, reflejando la moda y el estilo acordes a la época.
Conducta[]
Los ciudadanos trabajadores son colaboradores por naturaleza: si están recogiendo recursos pero hay un colega suyo cercano que está apurado con la construcción de un asentamiento, acudirán apoyar con el trabajo en lugar de seguir su ruta habitual hasta el depósito de recursos previo. También son organizados y eficientes: si el trabajo de construcción es evidentemente grande, los ciudadanos se dividen y atienden un punto en particular. Un buen ejemplo son los muross: al asignar la construcción a más de un ciudadano, uno empezará en un extremo y el otro acudirá al otro extremo para terminar la construcción hacia el centro, o se distribuirán a lo largo del trazo de los cimientos. Sin embargo, a veces no son muy listos. Dado que siempre rodean la parte que van a construir, a veces pueden quedar encerrados entre edificios, árboles o precipicios que les imposibilitan salir a piso firme. Si las tecnologías están disponibles, un barco u helicóptero de transporte puede rescatarlos; de otra forma, se tendrá que demoler los edificios o eliminar a la unidad.
Dado que cada mina o pasto de hierbas se puede explotar hasta por 6 ciudadanos a la vez, si más tienen la orden de explotar el mismo lugar esperarán inactivos para turnarse con otra unidad que haya terminado de recolectar la cantidad maxima.
Actúan de manera evasiva y huyen siempre a lugares alejados al verse atacados, incluso por animales, sin importar el trabajo que antes estuvieran llevando a cabo. Esto brinda al jugador oportunidades significativas de recuperación, ya que los ciudadanos duran más tiempo con vida al esparcirse sobre el terreno y así es más difícil acabar con ellos. Sin embargo, todo ciudadano responderá al ataque sólo por órdenes directas del jugador, empleando para ello las armas dispuestas según la Edad en la que estén, aunque nunca se debe esperar que sus ataques sean poderosos.
Como es lógico, no son las mismas en todas las edades. La evolución de herramientas y utensilios bélicos es evidente desde la Edad Prehistórica hasta la Edad Nano, donde las lanzas y rocas se convierten en fusiles de rayos láser.